Cariño eres multimillonario

Capitulo 170: Prestandole Medio Lado de la Cama

-¢ Sefiorita Lucia Valenzuela?

Thiago se qued6 paralizado por un momento. Vio que la mirada de Santiago se
endurecia y de inmediato report:

-En el video que grabaron, la sefiorita Lucia Valenzuela estaba bebiendo con
ellos y en medio de ello, iba a visitar a la sefiorita Lancaster, pero la retuvieron
para seguir beblendo.

-Mas tarde, parece que la sefiorita Lucia Valenzuela también se emborraché. En
la vigilancia del atico, después de las doce de la noche, la sefiorita Lucia
Valenzuela se apresur6 a subir, con un semblante ansioso, como si estuviera
buscando a la sefiorita Lancaster.

Santiago miraba a Alonso con una mirada profunda.

-¢Sospechas de ella?

Justo cuando Santiago hizo la pregunta, de repente se escuché un ruido desde
afuera.

-¢Quién es? -Thiago sali inmediatamente y vio a una persona con rostro
aterrorizado-. Sefiorita Lucia...

Lucia eché un vistazo a Santiago y Alonso en la habitacién y, como si se lanzara
al vacio, entré.

En cuanto entré, se apresuré a explicar.

-No fui yo, no hice nada, solo queria llevar a Valen a navegar para distraerse un
poco, no pensé que tendria un conflicto con Damian, y mucho menos que
después Damian intentaria lastimar a Valen, causando que Valen cayera al
agua...

Su expresion era agitada, su mirada sincera, como si intentara probar su
inocencia, y de repente

levant6 la mano para jurar:

-Si yo fuera capaz de lastimar a Valen, que me caiga un rayo, jque no muera—en
paz!

Lucia miraba a Santiago y Alonso. Ambos también la observaban, pero durante
mucho tiempo

ninguno de los dos dijo nada.

De repente, Santiago se levanto y sali6 de la habitacién. Lucia se quedo
sorprendida, y sin pensar, lo llamé.

-Sandy...

Pero Santiago, como si no la hubiera escuchado, se fue sin mirar atras.

+15 BONOS

En la Casa Principal de la Villa Valenzuela.

La primera sensacion de Valentina al despertar fue la sed. Encendi6 la luz,
dispuesta a bajar a beber agua. Solo habia una luz tenue en el edificio, Valentina
llegé al comedor, se sirvié un vaso lleno de agua y lo bebié de un sorbo,
sintiéndose finalmente saciada. Justo cuando iba a regresar a su habitacion, se
dio la vuelta y vio una figura alta y oscura. La luz era tenue, pero Valentina
reconocié de inmediato que esa figura se parecia mucho a don Mendoza. Quizas
por el miedo instintivo a don Mendoza, Valentina estaba a punto de gritar. Pero
apenas abrié la boca, la figura se abalanzé sobre ella, tapandole la boca.
-iMmm...

En su desesperacion, Valentina estaba a punto de levantar la pierna para
golpearlo en alguna parte. Pero entonces se escuché una voz baja.

-No te muevas, soy yo.

Valentina: ¢Por qué esa voz le sonaba tan familiar? jComo la de su marido!
Valentina mir6 fijamente al hombre frente a ella, y finalmente lo reconocié.
-iEres ta! ¢ Qué haces aqui?

Inconscientemente, Valentina penso en la sefiorita Lucia Valenzuela. ¢ Habia
venido por Lucia? Algo en el corazon de Valentina parecié ser pinchado, y luego
escuchd la voz lastimera de su esposo en su ofdo:

-¢ Por qué si no? Estas aqui, solo puedo venir yo también.

Valentina: «¢Qué dice? ¢Por mi? ¢No es por la sefiorita Lucia Valenzuela?»
-Espera, hermano, en serio solo quiero llevar a Valen a navegar para despejar
su mente...

iEra Lucia!

Casi sin pensarlo, y no queriendo enfrentar a las tres personas en la batalla
campal, Valentina

tomé la mano de Santiago.

-Habla més bajo y sigueme.

Santiago no dijo nada, simplemente sigui6 a Valentina al segundo piso y
entraron en su

habitacion. Valentina cerr6 la puerta con cuidado, y Santiago, con un destello de
diversién en sus ojos, coment:

-¢Intentas esconderme?

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Santiago habia leido su mente..

-¢Esconderte? Si querias irte, vete y ya -dijo Valentina, evitando su mirada.
¢Vino por ella y ahora queria saludar a la nueva clienta?

-Haz lo que quieras.

Valentina le lanzé una mirada fulminante, luego salté a la cama y se cubrié
completamente con

la manta, dandole la espalda deliberadamente.

Santiago, observando su comportamiento, sonri6 satisfecho.

Ella lo estaba escondiendo, y él estaba més que feliz. ¢Por qué iba a querer
irse?

Tranquilamente, Santiago cerr6 la puerta con llave y se acercé a la cama.
Valentina sintié que el colchén se hundié ligeramente a su lado y la luz de la
habitacién se

apago.

Ella se gir6, enfrentdndose a unos ojos oscuros en la oscuridad.

-¢Qué...?

Valentina estaba a punto de decir algo cuando, de repente, alguien intenté abrir
la puerta.

-Shh... le hizo sefias Santiago, pidiéndole silencio.

La persona fuera intenté abrir varias veces, pero al no lograrlo, se dio por
vencida.

Valentina protesté en cuanto sintié que la persona se habia ido:

-¢Qué haces? jEsta es mi cama!

Ella hablé en voz baja, temiendo atraer atencion. Pero Santiago no se ipmut6.
-Dijiste que haga lo que quiera. Solo quiero compartir medio lado de tu cama,
¢no seras tan tacafia, verdad? Después de todo, no dudé en prestarte mil
millones de délares...

Eran esposos, compartir cama era lo mas natural.

Valentina: El era su acreedor, y ella no tenia argumentos.

Aunque eran esposos solo de nombre y ya habian hecho lo que debian y lo que
no, Valentina atin separaba sus lados de la cama con una almohada.

-Puedes tomar medio lado de la cama, pero no traspases el limite. O si no...
+15 BONOS

Valentina advirtié con los dientes apretados, luego se giré y lo ignoro.

Santiago, sin embargo, no le dio importancia. Al pensar en el peligro que
Valentina enfrentd la noche anterior, su expresion se torno seria en la oscuridad.
No podia imaginar lo que hubiera pasado si Alonso no hubiera llegado a tiempo.
Afortunadamente, Alonso llegé....

-Valentina... -Santiago mir6 la nuca de ella.

Valentina, de espaldas, tenia los ojos abiertos pero no respondié. Antes, en el
restaurante, él

habia dicho que habia venido por ella, lo que le habla causado una sensacién
extrafia en el

corazon. Se sintié feliz. Pero ahora, en la calma, ese atisbo de felicidad le
causaba miedo.

Especialmente cuando pensaba que iba a morir en el mar y recordé a su
esposo, la tristeza y la

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inquietud la invadieron. En su

corazon, su esposo significaba algo
diferente ahora. Ese sentimiento
diferente la asustaba de profundizar.
Exhalando un suspiro, Valentina

cerré los ojos, The content is on
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negéandose a continuar pensando.

Lucia regresé a la casa principal y, al no encontrar a Santiago en ninguna de las
habitaciones.

supo que debia estar en la habitacion de Valentina. Si no fuera porque temia que
Santiago la despreciara atin mas, habria entrado a la fuerza.

Pero se contuvo.

Viendo a Alonso, que también habia intentado abrir la puerta varias veces sin
éxito, Lucia sonri6

friamente.

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Alonso habia pasado casi toda la

noche despierto. Sabia que Santiago

y Valentina estaban juntos en una
habitacion, pero no entro por la

fuerza, confiando en la integridad de
Santiago. Aunque le The content is

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gustaba Valentina, no aprovecharia la situacion.

Al amanecer, Alonso salié. Justo cuando cerré su puerta, la puerta de Valentina
se abri6 y

Santiago sali6.

Ambos se miraron, sorprendidos por un momento, antes de actuar
simultaneamente,

ajustandose las chaquetas de sus trajes y bajando las escaleras.

-Gracias.

Santiago rompi6 el silencio. Alonso lo miré confundido, y Santiago continud.

-Si no fuera por ti, Valentina habria corrido un gran peligro. Gracias por salvarla.
Alonso entendid, pero resté importancia.

-La salve, no por ti, y no necesito tu agradecimiento. Ademas, Valen ya me
agradecio.

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Dicho esto, Alonso sali6 primero.
Santiago se quedo con el cefio

fruncido. Valen? ; Desde cuando

podia llamarla asi de intimamente?

Ni siquiera él la habia llamado Valen!

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Santiago, molesto, se apresurd a alcanzar a Alonso y camin a su lado.
-Salvaste a la persona mas importante para ml, por supuesto que debo
agradecerte.