Nunca Mueren Los Deseos (Sabrina y Fernando)

Capitulo 310-

Sabrina devolvié a Alta Costura JK con el borrador del disefio. De alguna
manera, ella no se sentia bien. Tenia el presentimiento de que Olive le dio el
borrador con malas intenciones.

Ahora que sabia que el novio de Olive era ese Salvador enfermo, se sinti6
inquieta.

Pero fue Molly quien le entregé el borrador. Nunca tuvieron viejos rencores, por
lo que Molly no deberia querer hacer dafio.

Sabrina se recosto en su silla y se calmé. Se consolé Todo lo que tengo que
hacer es disefiarle el vestido*.

si misma: “No me tiene que importar si Salvador es el novio de Olive.

Ella no contactaria a Salvador. Sintiéndose aliviada, Sabrina comenzé a
concentrarse en disenar el vestido.

Después de que Sabrina se fue, Olive inst a la manicurista a darse prisa.
Salvador esperaba en el sofa afuera.

Tenia mal genio, asi que ella no podia hacerlo

esperar.

Pero lo que ella desconocia era que Salvador tenia a Sabrina en su mente
ahora. No pudo evitar pensar en los labios rosados de Sabrina, sus grandes ojos
inocentes y su piel clara y suave.

Su cintura parecia ser tan delgada que podia sostenerla con una mano, sin
mencionar sus largas piernas y sus suaves senos. Esa mujer era una obra
maestra.

Mientras Salvador seguia imaginando, sintié una oleada de deseo, sus ojos se
entrecerraron y sus manos se tensaron. Mird a la mujer que se estaba
arreglando las unas.

No tenia paciencia para ella ahora. Aparté de una patada el taburete pequefio
junto al sofa y le dijo enojado a Olive: “; Terminaste? Se me acabd la paciencia“.
No queria perder ni un minuto mas aqui.

La mirada asesina de Salvador asusté a la manicurista que no se atrevié a
continuar con el trabajo y empaco para irse.

Olive también estaba asustada. Sabia que Salvador nunca fue un hombre facil
de tratar, asi que sonri¢. “;Esta bien! He terminado*.

Mientras hablaba, la manicurista y su agente se despidieron con sensatez.Books
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Ahora solo estaban Olive y Salvador aqui. Salvador se aflojo la corbata y sefialé
a Olive. “Ven. jDesnudate!”

Pero Olive no queria arruinar sus hermosas ufias, asi que camino hacia
Salvador y le dijo malhumorada: “Sr. Navarro, ;cudl es la prisa? Acabo de
arreglarme la ufia. Sea amable conmigo“.

“¢ Amable?” Salvador se divirtié y pensé: “Eres simplemente una herramienta
para mi para calmar mi deseo. ¢,Por qué deberia ser amable contigo?”
Salvador no tuvo tiempo de hacer este juego previo con ella. El la abofeted.
“IPerra! Solo haz lo que te digo. {No tengo tiempo para esto!”

Salvador no estaba bromeando. Golpeé a Olive con tanta fuerza que casi grit.
Pero ella no se atrevié a perder el tiempo. Se quité el vestido y se paré frente a
él desnuda.

Salvador midi6 el cuerpo femenino de arriba abajo. Un rastro de maldad
aparecid en sus 0jos. Luego atrapé una pequefia botella de vino en la mesa.
Lo tomé y le dijo a Olive: “IMete esto ahi abajo!”

Esta solicitud envié un escalofrio a su columna inmediatamente. Ella no queria
hacer esto, asi que lloré, mordiéndose los labios. “Sr. Navarro, no puedo... Por
favor, no haga esto”.

“De

de llorar! jHazlo ahora!” Lo que mas molestaba a Salvador no era mas que una
mujer que lloraba. El le orden sin piedad: Si no lo haces, lo haré

por til”

Después de eso, Olive cayo al suelo, llorando y temblando.

Sabia que Salvador tenia fama de sadico.