Capítulo 118 *¿Será que Iker y yo estamos predestinados, verdad, Iker?" "Uh- huh... predestinados." Carol acariciaba suavemente su mejilla, y se dirigia a Rufina, "Me gustaría quedarme un rato a solas con lker, ¿te parece bien?" "Claro que si, conversen tranquilos, yo voy a esperar afuera, cualquier cosa me llamas." "Está bien." Cuando Rufina se fue, Carol movió sus dedos frente a los ojos de Iker y le dijo, "Iker, mira mi mano, vamos a contar juntos, uno, dos, tres, cuatro, cinco..." Chasqueó los dedos y de repente Iker se desmayó. Veinte minutos después, Carol salia de la habitación. Rufina, ansiosa, preguntaba, "¿Cómo está? ¿lker mostró alguna mejora? ¿Puede recibir el alta?" "Si, lo he hipnotizado para echar un vistazo a su mundo interior, y ha cambiado mucho. Ahora hay sol, césped y gatos en su interior. ¿Antes le gustaban mucho los gatos?" Rufina, con el corazón apretado, respondió, *...Le encantaban, tenía uno, pero justamente cuando lo buscaba fue cuando lo secuestraron, y también perdimos al gato." "No me extraña... Si en casa están de acuerdo, podrían considerar tener otro gato. Son terapéuticos y podrían ayudar a Iker." *¡Claro! En cuanto llegue a casa lo organizo. Entonces, ¿ya puede volver a casa?" *Sí, puede irse a recuperar en casa, pero las enfermedades psicológicas no sono un resfriado común, llevará tiempo recuperarse completamente. Prepárense para eso y no se desesperen." "Lo entiendo, el simple hecho de verlo mejorar ya es un milagro. Antes de conocerte, ya habíamos perdido la esperanza... Carol, eres un ángel para la familia Fuentes, no sé cómo agradecerte. Si alguna vez tienes un problema, no dudes en decirmelo para ayudarte." "No tienes por qué ser tan seria, tú también me ayudaste hoy en el centro comercial y estoy agradecida." naba la nariz. Rufina se sonaba la nariz, "No es lo mismo... No hay cómo agradecer un favor tan grande. De ahora en adelante, eres mi hermana. ¡Si alguien se atreve a hacerte daño, tendrán que pasar sobre mi!" 13:21 Capitulo 118 Carol sonrió." "Oye, ¿y si cenamos juntas esta noche?" Carol iba a rechazar cuando Rufinal dijo, "No solo es por agradecimiento, también es que desde lo de lker, él no ha querido salir, solo está en casa o en el hospital. Me gustaria aprovechar que estás aqui para que respire un poco de aire fresco, tiene que dar el primer paso y ser valiente, ¿no crees? Si tú no estás, seguro no! querra ir y nosotros no nos atreveríamos a llevarlo asi sin más." "..." Sin poder rechazar, Carol aceptó la invitación. Mientras Iker seguia dormido, llamó a Tania para contarle lo de la cena. Tania le dijo que los pequeños seguian durmiendo, que no se preocupara por ellos, que cuando despertaran les prepararía algo. Colgando el teléfono, Carol se sentia reconfortada. En la vida, tener una amiga tan buena como Tania era una bendición. Tania y Samira eran sus diosas de la fortuna. De repente, al pensar en Samira, Carol recordó a Enrique y a su prima, y esa mirada que le dio cuando la vio. Esa mirada de rival en el amor le daba inquietud. Después de colgar, por alguna razón, Carol se encontró en la clinica de maternidad. Enrique y su prima ya no estaban, así que decidió preguntarle a los médicos. Pero los doctores alli eran muy discretos, ninguno quiso revelar información del paciente. Sabía que era su deber como médicos, así que no se molestó. Justo cuando iba a retirarse, por pura coincidencia, se topó con Nathan que estabanto de terminar
su turno.